jueves, 15 de noviembre de 2012

No todo lo que brilla...

Todo puede parecer brillar, relucir cual oro pero termina siendo dolor, angustia
y todo lo malo que eso representa.
Me di cuenta de muchas cosas, como que ciertas señales me lo indican.
Nunca pensé que algunas personas formaran un apoyo tan importante,
pensé que los apegos los estaba eliminando, pero no,
lo contrario, cada vez me acercó más a la gente que quiero.
Creo que es porque me siento protegida, como si cada persona
formara una capa más de indestructibilidad. 
Pero también algunos se van,  se alejan, quizás porque se dan cuenta de que no estoy bien,
que estoy rota, y que no pueden ayudarme con eso.
En mí hay como una grieta, adentro, que separa el bien del mal, 
mis pensamientos positivos de los negativos, pero el problema es cuando se mezclan
y ya no sé qué es el bien y qué es el mal, quién manda,
si estoy haciendo lo que tengo que hacer o lo que quiero, 
todo se nubla y el lugar a donde quiero correr siempre está lejos,
se cierra, se oscurece; y creo saber cuál fue la raíz de todo esto...
El detonante fue cuando dejé ir una parte de mí que me lastimaba y me sentí liberada, pero vacía, como incompleta.
Será que falta poco para que ese hueco se llene con algo que me haga sentir bien, algo mejor,
o puede que no y que, por un impulso, solté algo irreemplazable, pero supongo que eso lo sabré más adelante, o quizás no, ¿Quién sabe?
Por ahora creo que es mejor seguir con la eterna búsqueda, después de todo es mi razón de ser.