Todavía sigo shockeada, no puedo creer haber estado en Baradero, ver a Pato, verlo cantar, sonreír.
Fue especial, en TODOS sentidos, en cada uno.
Desde el comienzo, cuándo pensaba que iba a ir, y después se me cayó el mundo abajo pensando que no, sin embargo... Nunca me resigné, siempre me quedaba ese hilo de esperanza de que caiga del cielo, no sé, pero necesitaba estar ahí.
Un día antes, sólo un día antes llegó esa entrada que tanto esperé, le sumó emoción al asunto, toda la emoción que debería haber tenido si la hubiese conseguido antes vino en ese momento, miles de sentimientos juntos:
Miedo, alegría, ansiedad.
Por fin llegó el día, incluso me desperté temprano, cuando no debía hacerlo. Llegué a Pompeya (y en mi cabeza sonaba Pato cantando... En la esquina del bar de La Plata y Saenz los borrachos se pelean como costumbre...)
El viaje, con Beby, el ''Oseaaa, helloow, la leche está fría'', los chistes, las risas, las fotos.
Llegamos, por fin, estábamos en Baradero. Lo que parecía tan lejano cada vez estaba más cerca de hacerse realidad. Corriendo, para acá, para allá, buscando a Ale, él tenía mi entrada; estar esperándolo, una chica preguntándonos ''Es el primer reci'' nuestras caritas de nenas chiquitas ''Sí'' , seguido de ''Quieren'' (Señalando el Fernet).
Llegó Ale, la entrada en mis manos, la emoción, el abrazo.
Entramos, por fin. El cacheo, la chica ''Ay morocha, tócame toda''. Cada cosa fue especial.
Una vez adentro, empezamos a buscar a las chicas, vimos a Viqen, ansiedad por llegar a abrazarlas. Yamil, Shuli, Flor Capa, Aldy. Estaban las que tenían que estar.
Los cantitos que decían Callejas, las minas que gritaban cuál nenas de 12 viendo a Justin Bieber, el ''Casi Justicia Social'' re forever alone, de Ya.
Agarradas de la mano con Beib ''No me sueltes, pase lo que pase, no me sueltes la mano''. Aún con cerveza, o las manos transpiradas que se nos resbalaban, seguíamos agarradas.
Empezó, por fin...Verlo entrar, saber que es real y que nunca fue un sueño, nada igual a lo que me imaginaba. Introducción de varios minutos, la cual parecía que empezaría ''Tanto de todo'' para darnos manija, pero no, no era.
Primera canción: Los Invisibles, todo lo soñado, y más. Esa inoxidable pasión, sigue intacta ahí, como hace 9 años.
Tantas otras, que emocionaban, te ponían la piel de gallina. Todas tienen ese ''algo''.
9 de Julio, esa canción que escuchábamos cuando eramos a penas unas nenas, estaba sonando, Beby y yo agarradas de la mano, con el llanto en los ojos, de pura emoción.
Euforia por las que le siguieron, gritar, bailar, saltar, quedarse en estado de shock.
Lo que hay, la llave, lo que hay,la llave, mezcladas. Fue todo.
Algo peor, algo mejor, fue lo mejor del mundo poder escucharla en vivo, por fin.
Cristal, las caritas de todas emocionadisimas, no pensábamos ni en sueños que la tocarían, pero lo deseábamos. Shuli subida a un flaco. Extasiada.
Jugando, estalladas en llanto, Yamil abrazándome. Aldy buscando desesperadamente a alguién para subirse.
Armar de nuevo, juro haber soñado muchísimas veces con el cantito ''Vaaaaaaamos, vamos Callejeros'' Y lo viví, lo canté, lo grité.
Se iba acercando el final...
Y vino El NUDO. Listo, empecé a escuchar los acordes y las lágrimas volvieron a brotar. Atiné a abrazarme con Beby, y así nos quedamos todo el tema, abrazadas, escuchando y llorando, pero juntas. Ahí sentí que nada malo me podía pasar. Me sentí protegida, como si estuviera con mi mamá, pero estaba con ella.
Ya a esa altura no necesitaba nada más pero no podía no sonar Suerte... Yo dije... Van a cerrar con Suerte y así fue.. A la parte de ''La suerte de ENCONTRARLAS alguna vez y sentir que para, casi, todo hay solución'' todas apapachadas, juntas.
Se terminó, creo que nadie podía hacernos sacar la sonrisa que teníamos, y no caíamos que ya había terminado, que tres horas se hayan pasado así, tan rápido.
Volviendo, caminando, nos cruzamos con Pelu, fue lo que me faltaba en la noche, lo que me faltaba para que sea perfecta, verlo me hizo muy bien, lo pensé muchas veces durante el recital y lo llamé con la mente, parecería, no? Fue mucho, poder abrazarlo.
Todo fue especial, cada detalle, cada abrazo, cada beso, cada risa y cada lágrima que caía sin querer o queriendo.
Escucharlo, por fin, cumplir mi sueño. Sentir que ahí estaba en mi lugar, en donde debería haber estado hace rato y si no estuve antes fue porque no era el momento. Tanto que se hizo esperar y llegó, fue perfecto, en todo su contexto. La compañía, las canciones, verlo sonreír, fue el plus, lo que me hizo estar más feliz aún.
Fui feliz, y soy feliz, gracias a haber vivido esto, y gracias a las personas con quienes lo compartí.
Una vez más... Callejeros va a tocar, SIEMPRE.
Siempre su voz y su sonrisa, van a ser mi salvación.
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